domingo, 22 de noviembre de 2015

Fotógrafo Henry Hargreaves "Power Hungry" ('poder-hambriento')

Un artista muestra las desigualdades social a través de comida

Con su proyecto 'Power Hungry', el fotógrafo Henry Hargreaves quiere mostrar "de manera metafórica y literaria la desigualdad entre clases sociales". Y su estrategia es poner sobre la mesa las diferencias entre la alimentación de ricos y pobres.
El fotógrafo neozelandés Henry Hargreaves es famoso por sus sorprendentes composiciones creadas con ayuda de elementos comestibles. Su último proyecto, llamado 'Power Hungry' ('poder-hambriento'), es un buen ejemplo de que la comida puede jugar un papel importante a la hora de poner de relieve las desigualdades sociales. 
Las fotografías de Hargreaves muestran las diferencias entre las dietas de los ricos y los pobres en distintas épocas de la historia de la humanidad. 
En la parte izquierda se ve qué comen (o comían) las élites, y a la derecha aparece la comida cotidiana de las clases menos favorecidas.  

Antiguo Egipto


La Francia prerrevolucionaria

Imperio Romano

Corea del Norte actual
La siguiente fotografía, correspondiente a Corea del Norte, revela que en este país el aislamiento entre las clases sociales es mucho más significante que en cualquier otra nación del mundo moderno. 

Siria actual
EE.UU. actuales

jueves, 17 de septiembre de 2015

Ana Gallardo

En la muestra "Instrumentos", demuestra un interés casi sociológico en la utilización de objetos, asumiendo su uso cotidiano y al mismo tiempo develando su función y relación más particular, más íntima de cada sujeto con ellos.
En este sentido es importante la producción que genera en relación a un tema como el aborto, asumida casi como una militancia. La manera de abordar el tema, presentándonos objetos utilizados para la práctica de abortos, nos reclama reflexionar sobre la clandestinidad, posibles secuelas y posibles muertes, al mismo tiempo que nos visibiliza los métodos abortivos a los que acceden las mujeres que se encuentran en situación de vulnerabilidad social, y llamando la atención sobre la diferente calidad y atención de las prácticas abortivas según las clases sociales.
La artista trabaja casi exclusivamente con útiles, pero modificando su condición de tal, recontextualizándolos y otorgándoles visibilidad. En ocasiones incluye en sus instalaciones elementos de otras disciplinas como la fotografía o la literatura, poniendo de manifiesto una fuerte intertextualidad. En otras, pone en juego un conjunto complejo de elementos tradicionalmente extraartísticos, por ejemplo, en la instalación presentada en el sótano de un local de ropa, realizada con manojos de agujas de tejer oxidadas y curvadas por el uso, incluye sobre una de las paredes un texto de la religiosa brasileña Ivonne Guevara que decía “ Una sociedad que no ofrece condiciones objetivas para dar empleo, salud, vivienda y escuela, es una sociedad abortiva”4. Aquí nos encontramos con un espacio, unos materiales y un texto que nada tienen que ver por si solos con el ámbito de lo que habitualmente es considerado artístico.
 Entonces, un repertorio extenso de objetos de origen artificial, pero también de origen natural está presente en sus instalaciones: ramos de perejil, ramas de apio, agujas de tejer, pinzas, tijeras, cucharas, que en primera instancia y sin más información nos resultan familiares y nos remiten a su uso utilitario en lo gastronómico, o textil, o medicinal, etc., pero que con sólo la añadidura de un dato, esos objetos toman otra dimensión que nos lleva por un laberinto de significaciones. En consonancia con José Jiménez, no resultaría forzado relacionar esta situación con lo planteado por él, cuando refiriéndose a los ready mades, dice: “Al eliminar la finalidad práctica o material de los objetos (...) se propicia la consideración estética de los mismos, no en un sentido ornamental o sensible, sino en un sentido básicamente conceptual”.




En la zona que remite al aborto casero, clandestino, además de las consabidas agujas –que también sirven para tejer batitas–, de ramos invertidos del clásico perejil y una bolsa de residuos numerada, se presenta una suerte de kit de herramientas que de primera intención pueden parecer de cirugía, quizá de carpintería. Pero no, se trata de utensilios de cocina –pinche de brochette, cuchillos, espátulas, cucharita, cascanueces, descarozador, tijeras– pegados con cinta a la pared, entre los cuales hay un solo instrumento médicoginecológico, un medidor de diafragma.

Ana Gallardo





La obra de Ana Gallardo (Rosario, provincia de Santa Fe, 1958), Instrumental (2000), que muestra,sobre una superficie de 200 x 200 cm, una urdimbre de ramos de perejil entrelazados unos con otros de manera muy regular. La presencia de este elemento (perejil), un producto de la huerta, nos conduce al hecho de que los ramos de perejil aluden a un método popular para producir abortos, uno de los temas abordados por la obra de esa artista.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

En la Argentina se producen siete casos al día de bullying.

El Patagónico  |  País/Mundo  - 31 agosto 2014

Durante el mes de julio hubo 140 casos de bullying denunciados, 44 más que en el mismo mes del 2013. La ONG “Bullying Sin Fronteras” manifestó su preocupación porque los hechos son cada vez más violentos.
La ONG "Bullying Sin Fronteras", informó que según estadísticas realizadas durante lo que va de este 2014, las denuncias por acoso escolar, también denominadas bullying, aumentaron en un 42 por ciento con relación con los hechos denunciados en el mismo período del año pasado. Mientras que en julio de 2013 se denunciaron en la justicia 96 casos graves, durante el mismo mes de 2014 la cifra se estiró hasta los 140 hechos.
"Más de la mitad de las agresiones se reportaron en Capital Federal, el Conurbano bonaerense, Rosario y las provincias de Mendoza, Córdoba, Formosa y Misiones", precisó Javier Miglino, fundador de la entidad.
En este marco, explicó que "si consideramos que en las escuelas cada mes tiene un máximo de 20 días de clases, es posible estimar que en la Argentina se producen siete casos al día de bullying", al tiempo que consideró preocupante la situación "porque a la vez que tenemos más casos denunciados, también hay más violencia en los chicos. Hace unos días una chica de 16 años fue golpeada por 'ser linda' esta vez en la provincia de Córdoba. Lamentablemente es una tendencia que crece".

EL PRIMER HOMICIDIO

Miglino recordó que durante 2014 se produjo la primera muerte de una estudiante a causa del bullying. Nayra Cofreces tenía 17 años y luego de un duradero hostigamiento por parte de dos de sus compañeras, aparentemente por su belleza física y su sofisticada forma de actuar, fue cruelmente asesinada frente a la escuela secundaria nocturna a la que concurría en Junín.

"No había registros de homicidios de víctimas de bullying a manos de sus acosadores antes del caso de Nayra, toda vez que en el tristemente célebre caso de 'Junior' en la ciudad de Carmen de Patagones fue 'la víctima' de bullying quién decidió vengarse y terminó matando a tres compañeros", acotó Miglino.

ACOSO A TRAVÉS DE LAS REDES SOCIALES

Las nuevas tecnologías no han hecho más que complejizar el fenómeno. Se ha incrementado el ciberbullying, es decir, el acoso escolar fuera de clases a través de las redes sociales. "Porque Facebook siempre había sido elegido como el vehículo para agredir, insultar, difamar y amenazar. Pero este año se agregaron los sitios Twitter, Ask.FM y Kik con lo que la pesadilla que padecen a diario los chicos acosados se multiplica", concluyó Miglino.
El referente, según publica Minuto Uno, también cuestionó la denominada ley antibullying, la ley 26.892, dado que no previene los ataques y ni siquiera aún fue reglamentada por el Ejecutivo Nacional.

Por último, citó las cifras del bullying en Argentina: "En 2013 hubo un total de 822 casos y en lo que va de 2014 tenemos 722 casos reportados (marzo 145, abril 154, mayo 144, junio 139, julio 140)".


Erwina Ziomkowska







Erwina Ziomkowska muestra a la prenda de vestir como algo que en ocasiones se convierte en algo perjudicial o poco práctico en pro de las modas en este sentido.  La artista polaca trabaja con prendas y complementos representativos de la feminidad (corsés, zapatos de tacón, ropa interior, etcétera) revistiéndolos de una armadura de miles de alfileres que perforan toda la superficie de las prendas y zapatos.
Con ellas comunica visualmente el dolor que en ocasiones supone a las mujeres intentar encajar en las definiciones sociales de belleza. Las cabezas de los alfileres dan una apariencia brillante y agradable en la superficie pero, sin embargo, en el interior, los miles de aceros punzantes hacen que las prendas sean peligrosas e inservibles.

Esta dialéctica creada entre la apariencia exterior y un interior amenazador codifica en sus obras un tipo de perversión, donde lo simbólico se abre a posibilidades extremas de interpretación que caminan entre el placer y el dolor, lo femenino y lo punzante, la pasión y el martirio. Una ceremonia sadomasoquista que puede localizar su atractivo entre la belleza y el sufrimiento.

Los violadores y su patología.

Los violadores y su patología.
Los violadores, su problema no es sexual, es un problema mental, padeciendo un trastorno de la personalidad. Obteniendo poder sobre la víctima (no así placer sexual), cometiendo un acto de dominio y sometimiento. Es un trastorno de la personalidad, un déficit en su estructura psíquica, es una estructuración perversa (en psicopatología psicoanalítica se hace referencia a estos sujetos como perversos). Perverso no es igual a maldad. Perverso viene del latín VERSUS que significa: ¨en una dirrección diferente ¨.
En el DSM-IV, se hace referencia a esta patología como ¨ sadismo sexual o trastorno sexual ¨.
Estos sujetos no han interiorizado la ley que nos han enseñado, considerando al otro no como una persona, como un sujeto, sino como un objeto en donde satisface sus necesidades, tratándose de un acto compulsivo. Mostrando conductas antisociales ligadas a la vez a otras conductas antisociales como robo y violencia, comenzando al final de la adolescencia. Estos comportamientos antisociales están ligados con la infancia: puede ser que el sujeto haya vivido marginación en su infancia, por eso manifiesta conductas antisociales o siendo que puede padecer, además, de ésto, una estructura de personalidad psicótica o perversa. Siendo su relación con el mundo exterior una relación marcada por considerar al otro como como objeto de satisfacción, aparentando en su vida ¨normalidad¨. Si se tratara de un sujeto psicópata no muy rígido de mente pero con estructura neurótica, sería susceptible de tratamiento psicológico que pudiera mejorar su caracteropatía. Si la base estructural es perversa o psicótica, ellos no quieren tratamiento ya que no consideran que hayan hecho algo para merecer un tratamiento, la solución no sería la cárcel ya que ella no corrige, si bien en la cárcel están contenidos y bien integrados al punto de que se los considerán de buena conducta, pero al salir, como la norma no está interiorizada, vuelven a cometer sus mismos actos, al faltarle la norma que la institución les imponía.

jueves, 10 de septiembre de 2015

Erik Ravelo - Los Intocables









En 2013, el artista cubano Erik Ravelo junto con el director artístico brasileño Daniel Ferreira lanzaba su último trabajo fotográfico, que causó mucho efecto internacional, sobre todo en las redes sociales después de incluso haber sido censurado por Facebook.
Se trata de Los intocables, una serie de fotografías que muestran niños y niñas crucificados en la espalda de sus supuestos opresores. Cada uno de ellos representa una realidad social distinta que nos lleva desde Japón a los Estados Unidos, pasando por Tailandia, el Vaticano, Siria y Brasil.
Erik Ravelo es un artista muy crítico con la sociedad, conocido anteriormente por la polémica campaña Unhate que realizó para Benetton y en la que se veían diferentes líderes mundiales besándose: como el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo de China, Xi Jinping.

Ésta vez, sin embargo, Ravelo y Ferreira han decidido hacer reflexionar de manera contundente sobre el maltrato infantil a escala mundial a través de la crucifixión personal.
Haciendo referencia directa a la crucifixión de Jesús, los artistas han fotografiado a siete niños y niñas con diferentes identidades crucificados en la espalda de sus supuestos respectivos maltratadores. Cada una de las imágenes, nos trae a una situación mundial diferente, aunque no menos extrapolable: la prostitución infantil de Tailandia, el tráfico de órganos de Brasil, la guerra civil de Siria, la pedofilia practicada por parte de la iglesia cristiana, la libertad de armas en Estados Unidos, la obesidad infantil causada por cadenas la promoción de la comida rápida y, finalmente, el accidente en la central nuclear de Fukushima.
Las imágenes de Los intocables son, a primera vista, sencillas y coloridas pero no menos impactantes. Al observarlas, vemos que sus protagonistas no son personas identificadas, sino que Revelo y Ferreira nos dejan entre la simbología y la denuncia social. Esto es gracias a la decisión de pixelar la cara de los niños y niñas y de poner a los hombres que representan la cruz de espaldas, de manera que se les puede identificar.
Tenemos así, ante nosotros, una clara mezcla de arte y comunicación en búsqueda de una sociedad más justa: esta vez reclamando la protección de los derechos invulnerables de los niños y niñas.